Una imagen que no he podido resistir captar con mi cámara y que creo que simboliza en parte un poco lo que es este país. Bueno, concretamente, esta ciudad, Tokyo.
En esta foto podéis ver la entrada a un templo chiquitito de los tantísimos que hay en la ciudad de Tokyo. Hay miles y miles. No sé la cifra. La he intentado buscar en Internet, pero no he encontrado la cifra exacta, aunque en su momento llegué a leer la cantidad y sólo sé que era una suma abismal para una simple ciudad. Una barbaridad.
Pero bueno, voy al tema.
La foto que os he puesto se trata de un Zoom in de una fotografía que hice el otro día. Este templito chiquitillo se encuentra enmarcado dentro de un contexto. Y ese contexto es el que define muy bien, para mi, lo que esta ciudad significa. Una ciudad (un país) que se encuentra a caballo entre lo tradicional, y lo moderno. Entre el pasado y el futuro. Y ambas realidades conviven en una asombrosa y peculiar armonía. Este país apostó (los EEUU parece que no le dejaron otra alternativa) por el desarrollo y la tecnología. Y así lo han hecho. Es por ello que ambas realidades tienen y deben coexistir.
Hagamos el Zoom out para que podáis entender lo que trato de explicar.
¿Podéis encontrar el templito ahora, entre tanto rascacielo? Curioso e impactante.
Os aseguro que en este barrio de Shinbashi, muy cercano de la famosa Ginza, los rascacielos abundan. La foto ya podía haberla tomado desde cualquier punto cardinal que el templito iba a estar siempre rodeado de columnas de hierro. Éstas son las que me han cabido en el encuadre desde el lugar donde fue tomada.
Es un pequeño ejemplo de tantísimos que hay donde puedes sentir los contrastes de la modernidad y lo tradicional. También está la típica imagen de la chica vestida de kimono en el metro, y a su lado un japonés con el pelo tintado de verde y lleno de tachuelas. Por aquí no es para nada raro encontrarte gente paseando en sus trajes tradicionales por la ciudad, especialmente si van a alguna fiesta, festival, meeting, etc. ¿Os imagináis la gente por España (por Andalucía más bien) paseando en traje de flamenco. Sí, me vais a decir que en Feria y en Semana Santa, y en alguna fiesta de guardar, pero el tema por aquí es diferente. Yo cada día veo a alguien vestido así en el metro, o por la calle. Y les veo en el metro, por la calle, dentro de coches de última generación, paseando entre rascacielos, como si hubieran viajado desde el pasado hasta nuestra época. Uno se siente atrapado en una época ficticia, entre el pasado y el futuro difícilmente descriptible.
Bueno, sólo quería compartir esta foto y esta reflexión.
Un saludo mu grande!
0 Responses to “Atrapado entre el pasado y futuro”